Al morir y llegar al cielo un pastor y un taxista, (Quienes habían sido vecinos y amigos en la tierra) son llevados a sus eternas moradas,
el pastor ve con asombro como al taxista se le instalaba una casa con piscina,
cancha de tenis y ¡toda la cosa!
mientras a el se le daba una casa común y corriente.¿Señor! pero que es esto?
¡Toda mi vida yo prediqué tu palabra sobre la tierra y mira lo que me haces!
Cuando tu predicabas yo solo escuchaba gente roncar,
pero hubieses visto con qué fervor la gente rezaba cuando manejaba este!