Un médico chino no puede encontrar trabajo en Estados Unidos, por lo que abre su propia clínica…
Seis meses después, un abogado pasa por la clínica y se da cuenta de que hay un letrero afuera que dice “EL TRATAMIENTO CUESTA $20, SI NO PODEMOS CURARLE
, LE DEVOLVEMOS $100″. El abogado piensa que esta es una gran oportunidad para ganar $100 y va a la clínica.
El médico se acerca a él cuando entra.
Doctor: “¿Qué parece ser un problema?”
Abogado: “He perdido el sentido del gusto”.
Doctor: “Enfermera, por favor traiga medicina de la Caja 14 y ponga tres gotas en su lengua.”
Ella busca la medicina y se acerca al abogado.
Enfermera: “Abra bien la boca para mí, señor”.
Cuando las gotas de medicina tocan su lengua, el abogado tose y balbucea.
Abogado: “¡Eso no es medicina, es queroseno!”
Doctor: “Felicidades, tu gusto se restauró. $20 por favor.”
Molesto, el abogado le paga al doctor $20 y luego se va. Todavía decidido a conseguir los $100, regresa unos días después y el médico lo reconoce de inmediato.
Doctor: “¿De vuelta otra vez?”
Abogado: “Lo siento, ¿nos hemos visto antes? Verás, he perdido la memoria.
Doctor: “Enfermera, por favor traiga medicina de la Caja 14 y ponga tres gotas en su lengua.”
Enfermera: “Ábrete de par en par y di ahh por mí”
Cuando las gotas de medicina tocan su lengua, el abogado tose y balbucea.
Abogado: “¿Más queroseno? Me diste esta última vez para restaurar mi gusto.
Doctor: “Felicidades, te devolví la memoria. $20 por favor.”
Furioso, el abogado le paga al médico $ 20 y luego se va. Más decidido que nunca, el abogado espera esta vez una semana entera antes de regresar. El médico lo reconoce de nuevo.
Abogado: “Mi vista se ha vuelto muy débil. Creo que me estoy quedando ciego”.
Doctor: “Lamentablemente, no tengo medicamentos para eso, así que le doy $100”.
El abogado mira fijamente la nota.
Abogado: “¡Pero esto son $20, no $100!”
Doctor: “Felicitaciones, su vista ha sido restaurada. $20 por favor.”