Un oficial de policía ve a un hombre conduciendo una camioneta llena de pingüinos.
Lo detiene y le dice: “¡No puedes andar en coche con pingüinos por este pueblo! ¡Llévalos al zoológico inmediatamente!”.
El chico obedece y se marcha.
Al día siguiente, el oficial vuelve a ver al mismo tipo conduciendo el camión lleno de pingüinos.
Pero esta vez todos los pingüinos llevan gafas de sol.
El policía detiene al hombre y le dice: “Creí que ayer te dije que llevaras estos pingüinos al zoológico”.
El chico responde: “Lo hice y hoy los llevaré a la playa”.