Dos exploradores iban caminando por la selva, cuando de pronto encuentran un palacio repleto de lujos.
Los tipos entran y deciden descansar, aunque solo había una cama.
El más astuto dice “como yo vi primero la cama, yo me acuesto en ella!, y el otro acepta y se acuesta en el piso.
Ya en la medianoche aparece un fantasma y dice “soy el fantasma del Machu Picchu, al que encuentre en mi cama me lo picho”.
Así, el tipo que se acostó en la cama termina con el culo perjudicado.
A la noche siguiente el protagonista le dice al otro que puede tomar la cama; y el más astuto se duerme en el piso.
A la medianoche aparece el fantasma y dice:Soy el fantasma de Machu Picchu, ¡como ya me piché al de la cama ahora me picharé al del piso!