Un anciano entra a una joyería con una joven rubia.
El empleado inmediatamente piensa que se están aprovechando de él debido a la diferencia de edad.
Ella le dice al empleado: “Muéstrame un anillo caro”. El empleado mira al anciano y él asiente con la cabeza.
El empleado saca un anillo y le dice “este cuesta $50,000 dólares”. Ella dice que es lindo pero quiero algo mejor.
Una vez más mira al anciano y éste asiente de nuevo con la cabeza. “Este es uno de nuestros mejores anillos y cuesta más de 300.000 dólares”.
Ella dice: “¡Me encanta, lo aceptaré!” El anciano escribe un cheque por el anillo.
El empleado dice que debido al valor en dólares,
el cheque tardará 3 días en liquidarse; regrese el lunes por la mañana para recoger el anillo”.
El lunes por la mañana el hombre regresa solo a la tienda.
El empleado dice: “Señor, lamentablemente el cheque no se aprobó debido a fondos insignificantes”. El hombre dice:
“Oh, sé que nunca se aclarará. ¡Solo quería entrar y contarte sobre mi fin de semana!