Un abogado se compra un BMW nuevito
y sale a mostrárselo a los otros abogados en el tribunal.
Llega y estaciona sobre la derecha, abre la
puerta para salir y en ese momento pasa un camión
y le arranca la puerta limpita. El abogado se baja
y empieza a putear y maldecir como un loco. Agarra su teléfono movil
y llama a la policía, que llega muy pronto. Comienza otra vez con las puteadas:
– Mi coche recién sacado del concesionario!, este animal bestia!, hijo de puta, me arranca la puerta!
Sigue así hasta que el policía le dice:
– Pero señor, ¿como puede ser Ud. tan materialista?,
¿no se ha dado cuenta que el camión, cuando se llevo la puerta, también le arranco el brazo desde el codo?
El abogado se mira el muñón atónito y dice:
– Nooo! ¿Donde está mi Rólex?!