Dos hombres moviéndose en un globo se pierden en el desierto. Ven a un individuo meditando a la sombra de un árbol.
- ¿Dónde estamos, por favor? le preguntan
Después de un largo momento de reflexión, el hombre les responde: - En un globo.
- Gracias, señor matemático.
El hombre pregunta asombrado. - ¿Cómo supiste que yo era matemático?
- Por tres razones, contesta a los aeronautas. Primero, pensaste mucho antes de contestarnos. Segundo, tu respuesta es muy precisa. En tercer lugar, es inútil.