Un hombre prepara su burro y su perro para un largo viaje por la montaña.
Coloca una mochila a horcajadas sobre el lomo del burro y la llena con todo hasta el máximo peso.
Debido al peso, decide tirar del burro para que no se canse tan fácilmente.
El hombre, el burro y su perro guardián comienzan ahora el largo viaje por la montaña para llegar al otro lado.
Tras varias horas de viaje largo y tranquilo, el hombre se siente muy cansado.
Él detiene el burro y decide que va a montarlo.
Justo cuando empieza a montar el burro, de la nada el burro dice:
¡BASTA! ¡Estoy harta de ser tu mula! ¡Te odio! ¡Deja de usarme!
El hombre queda desconcertado, pues nunca antes había oído hablar a un animal, y sale corriendo tan rápido como puede para bajar la montaña, con el perro detrás de él.
Cuando llega al final en un tiempo récord, se detiene y recupera el aliento.
Él está más que asustado y dice en tono asustado:
“¡Vaya! Nunca había oído hablar a un burro antes”.
El perro responde:
“Yo tampoco.”