
Hay tres moscas. Una va a dormir a una esponja, otra al jabón y otra al váter.
Al día siguiente la de la esponja dice:
“Yo he dormido muy cómoda…” la del jabón:
“Yo muy limpia…” y la del váter: “Buah, yo no lo puedo ni contar.
Primero ha llovido, después ha tronado,
ha caído un tronco y casi me ahogo…”