Llega el niño pequeño a la casa de su padre, todo golpeado, con los ojos negros,
la nariz sangrando, la ropa rota y vuelta una nada y el papá le pregunta:
¿ Pero mijito, y eso, qué le pasó?
Y el muchachito le dice:
Pues en la escuela un muchacho grande me golpeó y mire como me volvió papito.
Y el padre le pregunta:
¿ Y usted no se defendió?
Y el hijo le responde:
Sí papito, si no me vengo me mata el desgraciado.