Un día en la escuela unos niños estaban haciendo desorden y la profesora dice:
“Niño ¿como te llamas tú?”
“No se.”
“Bueno, tu tarea es investigar tu nombre.”
Y cuando llega a la casa le pregunta a su mamá “¿cómo me llamo yo?” y ella como estaba cocinando se echó aceite en las tetas y gritó: “¡MIS TE***!”
Al día siguiente le dice a la maestra:
“Profe, mi nombre es: Mis TE***”
Ya en el recreo, como nadie juega con é, se dirige hacia la maestra y le dice:
“Profe, nadie quiere jugar conmigo.”
Y la maestra dice:
“¡Niños, jueguen con mis TE***!”